domingo, 30 de septiembre de 2012

Arsenal 1 - 2 Chelsea

Niveles de contundencia


Dos jugadas a balón parado para cerrar un partido. Dos pelotas botadas desde puntos similares buscando el palo largo. Tres protagonistas en común: Juan Mata, Laurent Koscielny y Vito Mannone. La falta de contundencia volvió a matar al central francés; la indecisión enterró al guardameta italiano. Dos envíos  envenenados del '10' del Chelsea para que, primero Fernando Torres y después la propia inercia del balón colgado, golpeasen a un Arsenal bien tapado y con Santi Cazorla, su fuente ofensiva de mayor creatividad, anulado por falta de metros por delante. Dos golpes que permitieron a los blues hacerse con su primera victoria sin Didier Drogba en 34 partidos contra el Arsenal. Dos golpes... y Petr Cech.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Chelsea 6 - 0 Wolves

Buenas sensaciones


No es ningún secreto que la Copa de la Liga es un trofeo que los grandes de Inglaterra aprovechan para medir el nivel de sus menos habituales, sobre todo si el sorteo les empareja con un rival de menor entidad. Ayer en Stamford Bridge no se faltó a la "tradición" y el Chelsea saltó al verde con siete caras poco habituales en el once titular para hacer frente al Wolverhampton.

El resultado habla por si solo. El equipo carburó a la perfección e hizo olvidar la dinámica irregular de los últimos partidos. Teniendo en cuenta que el sábado se viaja al norte de Londres para hacer frente al Arsenal, en lo que será el primer choque de altura en liga, la jugada salió redonda: seguros de que los hombres clave llegan en buen estado y con un empuje de motivación extra. Y quizá lo más reconfortante de todo no sea el resultado, sino la más que probable garantía, si hay cierta continuidad, de un conjunto de futuro esperanzador. Cinco de los integrantes del equipo de inicio por debajo de los 23 años, con John Terry como techo con 31. Una media de edad de 24,3 años, con talentos como Lucas Piazón (1994) —que debutaba en competición oficial— tomando iniciativa y gozando de buenos minutos. Está claro que lo de ayer no pudo ser suficiente para hacer dudar a Di Matteo sobre la forma de gestionar el equipo, pero sí para ir estudiando quién puede asumir galones dentro de una plantilla que, si se acaba disputando todo, seguro se hará corta.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Chelsea 1 - 0 Stoke

Lo inesperado


Partidos como el de ayer en Stamford Bridge arrojan pocas dudas. Equipo bien plantado enfrente, difícil de sorprender; el Chelsea sin contundencia y con dificultades para improvisar y romper líneas enemigas. Nada que no hayamos visto. Con un panorama en el que el empate hubiese sido el final más justo, tuvo que llegar esa típica jugada que, en un principio, no esperas y de quien no esperas. Porque el atasco de los locales sólo parecía roto cuando uno de los dos laterales desdoblaba su banda. Porque ayer llegaron a vestirse de extremos, incluso de delanteros para, finalmente, saldar su esfuerzo descomunal con un gol agónico. Con profundidad. Ivanovic poniendo el balón por bajo, Mata prolongando y Ashley Cole definiendo con frialdad de killer. El trabajo se comió al talento. Con la esperanzadora línea de tres -Oscar, Hazard y Mata- caída por cortocircuito, hubo que confiar en lo inesperado.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Chelsea 2 - 2 Juventus

Nota de color


Siempre hay que sacar algo positivo y de la noche de ayer ayer no resulta difícil hacerlo. En un partido en el que la Juventus aprovechó bastante bien esa falta de consistencia que el Chelsea siempre suele acusar en algunos tramos, sobresalió joven Oscar, debutante en la Champions League, para poner la nota de color de los Blues. En un lapso de tres minutos, las dos acciones protagonizadas por el brasileño, que se desató y tomó los mandos del frente ofensivo, pusieron a Stamford Bridge en pie y catapultaron a su equipo hacia la victoria momentánea. Basta su maniobra en el segundo gol para evidenciar que estamos ante un diamante en bruto. Mucho nos queda por ver de este talento descomunal. Dejemos a un lado las dudas que sigue generando el centro del campo, las faltas de concentración en defensa o los debates sobre la posible llegada de un '9'. Cosas como la de ayer consiguen mantener la ilusión.

domingo, 16 de septiembre de 2012

QPR 0 - 0 Chelsea

Prevenir y curar


Pese al pinchazo en Loftus Road, el Chelsea continúa como líder en solitario de la Premier. Si miramos el casillero, los diez puntos que colocan al equipo como referencia en la liga inglesa nos hacen ver que la temporada no ha comenzado del todo mal. Quizá incluso con mejores expectativas que el año pasado. Quitando la más que olvidable actuación en la Supercopa, un empate fuera de casa -primera "no victoria" en liga-, a estas alturas y contra un rival que parece en progresión, se puede permitir. Sobre el papel, nada de alarmas. Lo que empieza a generar dudas, más allá de cualquier resultado, son los planteamientos con los que los blues saltan al verde. Son las sensaciones que transmite el equipo a medida que pasan los minutos, de tener recursos y no llegar a explotarlos.

Cuando algo no funciona bien, lo normal es cambiarlo. Ya no es sugerir que Roberto Di Matteo pruebe otro sistema fuera del habitual 4-2-3-1. Es simplemente que empiece a utilizar futbolistas que puedan rendir en determinadas demarcaciones. Se viene viendo cómo la pareja de mediocentros Mikel-Lampard no termina de funcionar, ¿qué hace Romeu sin una mínima oportunidad? ¿por qué se da salida a Meireles en el último momento? ¿por qué Ramires sigue jugando en banda cuando haciéndolo en la base aporta un mejor rendimiento? Variantes. Con la buena selección de jugadores que hay en línea atacante, y en el caso concreto del partido contra el QPR, ¿qué hacen ocupando los extremos Ramires y Bertrand? Vaya por delante que la colocación de éste último unos metros por delante de Cole llega a ser un acierto para crear superioridades tanto en ataque como en defensa, pero ante un rival teóricamente inferior, ¿qué hacen hombres como Sturridge o Moses en el banquillo hasta bien entrada la segunda parte cuando el equipo está atascado?

La temporada pasada, con un proyecto a medio hacer y una carencia de recursos evidente, llegaban a ser comprensibles muchas de las decisiones tácticas. Cuatro meses después, y con hasta cuatro incorporaciones -de las que sólo una es titular- claramente orientadas a mejorar la transición ofensiva, parece que nada ha cambiado en ese sentido. Al final puede salir bien o mal pero, cuando se tienen a disposición medios para poder cambiar cosas e intentar evitar una posible debacle, más vale prevenir que curar.


viernes, 7 de septiembre de 2012

El momento de Romeu

Con las últimas salidas producidas en el Chelsea, podemos llegar a concluir que la plantilla ha quedado totalmente cerrada -al menos hasta el mercado invernal- para la presente campaña. Haciendo un ligero repaso mental a cómo ha quedado distribuido todo, el equipo se presenta con una media de dos jugadores por puesto -si no contamos a aquellos que puedan subir del U21-, siempre a expensas de las rotaciones y cambios de posición que pueda exigir el técnico. 


Sin llegar a culminar un proyecto que podría haberse planificado mejor, sí podemos sacar algunos aspectos realmente positivos. Uno de ellos es la situación en la que puede encontrarse Oriol Romeu. El joven mediocentro se "quita" de un plumazo a dos competidores directos por un puesto en el once, Michael Essien y Raúl Meireles, que pusieron rumbo a Madrid y Estambul, respectivamente. La pasada campaña, aún bajo el mando de Villas-Boas, Romeu disfrutó de sus mejores momentos como blue, dando un mayor empaque al doble pivote y oxigenando el juego del equipo en una zona que aún se les resiste. Pero llegaron los problemas musculares y, más tarde, molestias en el menisco de una de sus rodillas, lo que le mantuvo alejado del máximo nivel hasta entrado el 2012, cuando Roberto Di Matteo -ya al frente del banquillo- tenía una base perfilada en la que Oriol contaba más bien poco.

La cesión de Essien al Real Madrid puede entenderse como una forma de que el ghanés recupere la forma, pero, ¿y lo de Meireles? Otra explicación que no fuese la total confianza depositada por Di Matteo en Mikel-Romeu como sostenes del trabajo de contención en el medio sería extraña. Por tanto, es de suponer que, con la irregularidad del nigeriano para sostener la base del centro del campo junto a Lampard, el '6' tenga oportunidades más que de sobra para demostrar que puede manejarse entre la defensa y la línea de mediapuntas. Es de suponer que, con continuidad y confianza, pueda "comerse" a Mikel para hacerse con la titularidad.  Es de suponer que, ahora sí, puede ser el momento de Oriol Romeu.

sábado, 1 de septiembre de 2012

Chelsea 1 - 4 Atlético

Ridículo


Si el partido de ayer no se colocó como el peor del Chelsea en los últimos diez años, no sé qué tipo de esperpento fue capaz de superarlo. No soy capaz de recordarlo. En disputa de un título. Es lo que pasa cuando quieres hacer lo que no sabes después de que el contrario lea mejor el partido que tú y saque a relucir todas tus carencias. Porque el Atlético aprovechó la empanada generalizada inicial -típica, por otra parte- para marcarse un partido histórico. Se "adueñó" del estilo de juego que a sus rivales tan bien les funciona y golpeó. No necesitaba dominar en campo contrario. Machacó a la contra y, con Falcao como castigador, sacó los colores a una defensa desbordada e incapaz. El Chelsea sólo tenía que volver a empezar para dar más argumentos a los de Simeone, para facilitarles la vida. Para cuando Di Matteo quiso arreglar el desaguisado, no hubo manera. Y es que ayer el nivel de fútbol de los blues fue directamente proporcional a su actitud. Ni un atisbo de reacción hasta bien entrada la segunda parte. Sólo un mínimo golpe sobre la mesa. Un gol que evita hablar del ridículo más absoluto únicamente sobre el papel. Si hay que ver el lado positivo de todo lo acontecido, me quedaré con que seguramente sea un tropiezo. De todo se aprende. Mejor ahora que en mayo, aunque sea a costa del segundo título en juego de la temporada.